EL PORNO: LA MALA EDUCACIÓN SEXUAL

Recuerdo hace poco un programa concurso, creo, en el que se invitaba a varios concursantes a comer una comida típica de los países nórdicos, creo que de Noruega. Era una conserva de pescado. El hecho es que cuando se abría la lata los concursantes caían de culo porque el olor era nauseabundo, repugnante. Solo por las caras que ponían se podía deducir que aquello era incomible. Pero hete aquí que había un señor de Noruega que cogió una de las latas de conserva de ese pescado y se la comió entre exclamaciones de estar comiendo un delicioso manjar. Es lo que tiene la educación. Estar comiendo esa conserva desde tu más tierna infancia te hace disfrutar lo que a otros les hace vomitar. Pues eso mismo pasa con el sexo en los adolescentes. 

Volvía a casa con el programa de Ondacero, Julia en la onda, y estaban debatiendo sobre la sentencia de la manada. Esos cinco "machotes" que violaron a una chica en los San Fermines de 2016. La sentencia les condena a 9 años por abusos sexuales cuando se esperaba una sentencia mayor, una sentencia de agresión sexual que es el término jurídico equivalente a lo que tú y yo llamaríamos violación y les habría condenado a unos cuantos años más. Y de lo que más ha escocido es que uno de los tres magistrados que han redactado la sentencia, ha dado su voto particular en el que decía que de violación o abuso nada de nada y que el ambiente que se vivió en el portal donde la manada violó a la chica fue de jolgorio. La indignación social ha sido tremenda y la de las mujeres, que ya venían calentitas desde el día de la mujer, 8 de marzo, unánime. Hasta el actual ministro de justicia, Sr. Rafael Catalá, ha tomado cartas en el asunto.

Pues como digo, estaba escuchando el debate del programa Julia en la onda y una de las participantes era Elisa Beni, la cual me genera mucha confianza lo que dice, y muy a menudo coincido con ella en sus comentarios. Y esta vez dijo algo que yo creo que es una de las claves de la educación sexual.

Con los jóvenes pasa lo que pasa con el pescado y el señor noruego. Decía Elisa Beni que aquellos padres con hijos e hijas adolescentes de 14 años... pongamos, que piensen que sus hijos no han visto nunca pornografía en la red son unos ilusos. Y entonces, estos adolescentes que aún no han tenido relaciones sexuales, crecen con la creencia de que el porno duro que ven en la red es "lo que mola". Que a las mujeres les gusta que las follen por todas las esquinas dos, tres, cuatro tíos y que hagan con ellas lo que quieran. Porque nuestros hijos son muy influenciables como lo fuimos nosotros. A nosotros nos influenciaban con los Levi's 501 y cosas así. Ahora la red marca tendencia.

Pero vamos a ver, ¿Cómo no van a pensar que eso del porno no es así tal cual lo ven en la red si un avispado saca una mierda de juguete que lo único que hace es dar vueltas y sobre si mismo y cuatro días después toda España, qué digo, todo el mundo lo ha comprado por 3 euros para abandonarlo una semana después?

¿Cómo no van a pensar que para ser alguién en tu grupo de amigos no hay que controlar a tu chica y cómo no van a pensar que lo que de verdad le apetece a tu chica es que le des, le peques y hagas con ella lo que quieras si a un "tontolculo" se le ocurre tirar al aire una botella con un poco de agua para ver si consigue que caiga de pie y al día siguiente no puedes dar clase porque está la clase entera tirando la botella al aire?

Nuestros hijos tienen el mundo en sus manos a través de la red y claro, con esas edades es "más gratificante" ver porno que tutoriales de física, por ejemplo. Y claro, el porno que se hace en la red ha pasada de ser simplemente sexo explícito a toda clase de porno duro.

Y así van a crecer nuestros hijos e hijas, como el señor noruego acostumbrado a comer algo que a nosotros nos parece asqueroso. Que usted o yo veamos un día el típico video porno que llega por una red social no tiene ninguna importancia. A los sumo haces un comentario jocoso y va a la papelera ipso facto. Porque sabemos la verdad de la vida sobre este punto. Nos engañarán con otras cosas pero sabemos "que las películas son mentira, hasta las que están basadas en hechos reales".

Y ¿Cómo se soluciona esto? Educación, educación y más educación. Y dar la matraca que el sexo no es lo que se vez en la red. Que el feminismo no es lo contrario del machismo y el respeto mutuo es básico.

Que el porno de internet es mentira... a ver si os enteráis adolestentes!!!